Un Tribunal Constitucional amedrentado o apocado no aplica medidas cautelares ante un Golpe de Estado catalán porque olvidó qué son y para qué y por qué son tales medidas

Íbamos a decir que nos sorprendía que los doctos magistrados del Tribunal Constitucional no se hubiesen atrevido a aplicar medidas cautelares frente a un Golpe de Estado catalán; Golpe de Estado basado en un conjunto de VOTOS radicalmente NULOS por haber sido arrancados a gentes completamente ignorantes del absurdo delirio que es, a estas alturas de los tiempos, el que una vulgar “comunidad de propietarios” --que es lo que, a la postre, es el parlamento catalán-- se proclame ‘independiente’ porque a su presidente le siga interesando llenarse sus bolsillos y, para ello, monte la mayor estafa electoral imaginable a base de OCULTAR INFORMACIÓN ESENCIAL a sus ingenuos compadres, de modo que, viciando insubsanablemente la formación consciente de su voluntad, les induce a optar, con ese colosal engaño, por algo que LES SUPONDRÁ su suicidio económico irremisible: la exclusión INSTANTÁNEA de la Unión Europea, y de su colchón monetario el euro, y de la libre circulación de personas y mercancías, y etc, etc. ¡Vamos!: algo así como erigirse en colonia extraterrestre afincada en la gélida luna saturnal de Encélado…

                            

Íbamos a decir --decíamos-- que nos sorprendía… ¡Pero no!: a estas alturas ya nada nos sorprende: ni tan siquiera el que los doctos magistrados del Tribunal Constitucional hayan olvidado flagrantemente lo que son y para qué y por qué son las MEDIDAS CAUTELARES que judicialmente hay que adoptar… PARA IMPEDIR --precisamente ‘impedir’, señores doctos-- EL DELITO Y SUS CONSECUENCIAS.

¿O es que usted está viendo cómo un loco se apunta en la sien con una pistola, y… ¿no va a intervenir para impedir que se dispare?? Pues eso, señores míos.

Las medidas cautelares, en Derecho, no se toman para fastidiar al delincuente potencial, sino para IMPEDIR que finalmente delinca o delinca MAS.  Por el ‘peligro’ que para TODOS entraña el ‘demorarse’ en actuar. ¡”Periculum in mora”, que se llama, señores doctos y apocados magistrados!

¿O acaso no estamos viendo todos los días cómo la policía judicial entra aquí y allá para llevarse ‘las pruebas del delito’ de pasteleos económicos de éstos o los otros? ¿Para qué? Para que no las destruyan y sus delitos, por tan fácil causa, pudiesen quedar impunes…

Pues ¡lo mismo! habría sido --señores doctos del Tribunal Constitucional-- impedir que una cámara ILEGÍTIMA, compuesta por ESTAFADORES ELECTORALES que han arrebatado VOTOS NULOS mediante ENGAÑO MAS que manifiesto de OCULTAR INFORMACIÓN ESENCIAL a ingenuos IGNORANTES embaucados por los CHARLATANES de feria que quieren ENRIQUECERSE ELLOS a base vender el ‘CRECEPELO del fierabrás’ de turno, no FINJA tomar decisiones… ¡‘democráticas’! (¡Dios nos valga!)

La democracia se basa en la honestidad de quienes informan para que los decisores sepan realmente lo que están eligiendo. Lo demás es puro HITLERISMO HISTRIÓNICO.

Y las NEFASTA consecuencias SOCIALES de éste último estamos TODOS obligados a tratar de IMPEDIRLAS y remediarlas ANTES de que se produzcan…

Fernando Enebral Casares

Prof. Dr. en CC. Económicas y en las de Información,

y en varias Universidades,

y Licenciado en CC. Biológicas y en Derecho