Peso-Press.- Noticias comentadas

Reflexiones pluridisciplinares sobre la actualidad reseñada en los medios de comunicación

viernes, 31 de octubre de 2014

Un Halloween que expresa la máxima depravación social, cultural y moral







La ‘fiesta’ --o más bien, burdo aquelarre entre los demoníacos aquelarres que incitan al desenfreno ante la muerte-- llamada Halloween es la más repugnante expresión de la depravación social, cultural y moral a la que puede llegar una civilización que ha dejado de ser humana para convertirse en algo peor aún que los animales de la selva. Porque éstos, al menos, matan lo imprescindible para sobrevivir. Mientras las personas hoy se matan entre sí por mera ‘diversión’ de los enloquecidos ‘jefes’ que con engaños e invocaciones a las más ruines pasiones conducen a sus pueblos al suicidio en masa.

¡Ni los elefantes se ríen de sus muertos y de la muerte, a quienes veneran en lo recóndito de cementerios sagrados…’ !

¿Acaso habrá quien se ría y haga chanza y mofa o befa de los muertos habidos hace dos años en el Madrid Arena en aquella fiesta enloquecida que por ganar un miserable montón de monedas organizaron unos cuantos?

Ha llamado a nuestra puerta un grupo de niños descerebrados --tanto, sin duda, como sus padres-- pidiendo un aguinaldo para juerguearse aún más de la muerte y de los muertosY les he preguntado qué les parecería si otros como ellos se rieran y divirtieran a costa de que sus padres, o ellos mismos, muriesen mañana mismo alcanzados por un rayo, doblegados por una hemorragia, arrastrados por huracán, o… simplemente de hambre y enfermedad y miseria como tantos miles de niños --como ellos-- mueren a diario en el mundo. ¡ Más de 20.000 por desnutrición, falta de agua, epidemias o pandemias!

Se fueron con el rabo --rabo corto, como de hienas-- entre las piernas… Pero ¿ qué clase de padres les azuzan al jolgorio rabioso en su corta vida por burlarse de la muerte ¡ de la que no escaparán por mucho que robasen y matasen para saciarse en lo podrido de sus entrañas!?

El recuerdo de la muerte es para animar a la solidaridad entre los humanos. Pero no para incitarles a unos festejos salvajes, propios de las más prehistóricas tribus incultas, en una puerca avaricia de unos disfrutes siempre efímeros, ruines y miopes.

¡Abominamos de Halloween como signo que es de la máxima depravación social, cultural y moral a la que puede llegar una civilización, un colectivo, o una persona humana!





0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio