Obama desbarra

El candidato Obama acaba de desvelar una faz nada tranquilizadora. De una parte (vid. noticia izq.) incurre en el perfil paranoico (que también acusaba Hítler, por ejemplo) de creerse y tenerse, por lo que parece, "el salvador del mundo". Y si a esto añadimos que ha comenzado a mostrar ademanes dictatoriales (vid noticia dcha.) como es el expulsar a periodistas que no le mostraban "adhesión", podemos advertir que Obama puede resultar un "lobo recubierto publicitariamente con piel de cordero"... de la que desprenderse cuando menos lo pensemos.

Y es que la "elección" (condicionada por los más de 5.300 millones de dólares que se gastan en 'lavar el cerebro' de los ingenuos electores) excede claramente las fronteras yanquis, porque su Presidente tiene demasiada relevancia e influencia mundial (vid lo de "cambiaremos el mundo"); y deberíamos --los demás de ese 'mundo' que Obama promete 'cambiar'-- tener alguna voz y voto, también, en velar que en EE.UU. sus Presidentes no sean fantoches sacados o apoyados por la farándula o los dineros de no sabemos quién, sino personalidades contrastadamente equilibradas, humanas, e intelectuales renacentistas.

Se nos abren las carnes cada que vez que, como Obama, un político o grupo político consigue el apoyo de cantantes o pelicureros...